En crisis con estilo

Estoy en crisis, pero con estilo (y algo de dignidad intacta).

No sé si es el clima, los planetas, la edad o simplemente el drama vocacional de cada cierto tiempo, pero últimamente he estado en una de esas etapas donde te preguntas ¿Y si todo esto no era?

Confieso que me gustaría que mi aparato digestivo se llevara mejor con el vino, es mucho mas chic pasar la crisis con una copa de vino en la mano, una copa, no media botella.

He empezado a cuestionarme muchas cosas. Proyectos que antes me emocionaban, al pasarlos por las variables de evaluación, por la data, no hay de otra que hacer una parada y repensar.

Tomar decisiones me da miedo. Y no un miedo épico tipo "corre que viene el dragón", sino más bien un miedo silencioso que te acompaña a todos lados como una sombra.

Pero ¿sabes qué? En medio de este caos existencial y profesional, tengo una certeza (que no siempre es fácil de sostener, pero ahí está). Sé que todo esto es parte de un cambio que va a ser para mejor.

Y reconozco también que muchas de mis crisis no me llegan… las busco. Sí, lo admito: muchas de estas crisis no me llegan por accidente… ¡las provoco yo!

De vez en cuando me reto un poquito (con intención, eso sí) para no quedarme dormida en la zona de confort. Porque si hay algo que no quiero es caer en la repetición vacía.

Quiero encontrar nuevas formas, nuevas ideas, fórmulas más auténticas y útiles.

Los que me conocen en mi faceta como coach, saben que he sido pionera en muchos nichos. Me muevo cuando siento que la sobresaturación arropa el mercado.

Y es que al final del día, mi mayor motivación es ofrecer algo que realmente le sirva a los demás. A ti, que estás leyendo o escuchando desde el otro lado. A ti que has sido, eres o serás mi cliente.

Como parte de este proceso de cuestionamiento creativo, he decidido cerrar la temporada del podcast “Mujeres que no caducan”,este mes de mayo, justo dos años de que comenzara esta maravillosa experiencia. Cuantas mujeres impresionantes he conocido, cuanta enseñanza y sabiduría me llevo. Que seguro que todo esto, traerá algo refrescante dentro de este movimiento de “Mujeres que no Caducan” Este es un hasta pronto, no un adiós. Recuerda que los episodios quedan activos y que son un documento real de lo que somos de verdad las mujeres, libres, sin roles estereotipados y con una fuerza increíble para seguir adelante.

 Si tú también estás en esa etapa……de “¿y ahora qué hago con mi vida?”, bienvenida al club. No tenemos respuestas definitivas, pero sí una brújula que apunta hacia lo honesto.

Seguimos caminando. Con dudas, con ganas y —cuando se puede— con algo de humor.

 Gracias por estar ahí. 

Nos leemos muy pronto. Porque el blog sigue y las redes, talleres y conferencias TAMBIEN.

Con cariño y agradecimiento, 

Sara Pastor

Una mujer que no Caduca.